OTIS golpea a Guerrero con vientos mortales y marejadas ciclónicas devastadoras
Durante la noche de ayer martes, el huracán Otis se convirtió en categoría 5, la más alta en la escala Saffir-Simpson. El fenómeno natural se ubica, a la 1 de la mañana, a 90 km al Sur-Sureste de Acapulco, Guerrero.
Se prevé que el huracán impacte entre Acapulco y Técpan de Galeana, entre las 4 y 6 de la mañana de este miércoles 25 de octubre.
NHC Eastern Pacific, a través de su cuenta de X, pronosticó “que será un huracán de categoría 5 potencialmente catastrófico cuando llegue a la costa Sur de México con vientos mortales y marejadas ciclónicas devastadoras”. Indicó que las fuertes lluvias de Otis producirán inundaciones urbanas.
De acuerdo con información de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), durante ayer martes, en el transcurso de 21 horas, Otis pasó de Tormenta Tropical, con vientos máximos de 85 kilómetros por hora (km/h) y rachas de 100 km/h, a huracán Categoría 5, con vientos máximos de 260 km/h y rachas de 315 km/h.
Su amplia circulación y sus bandas nubosas ocasionarán lluvias puntuales extraordinarias en Guerrero, y muy fuertes a intensas en Oaxaca.
Además, incrementa la probabilidad de lluvias fuertes en:
Michoacán
Estado de México
Morelos
Puebla
Tlaxcala
Oaxaca
Dichas lluvias originarán visibilidad reducida, deslaves, encharcamientos o inundaciones, así como incremento en los niveles de ríos y arroyos.
La gobernadora de Guerrero, Evelyn Salgado, anunció la suspensión de clases en toda la entidad por el huracán Otis.
Asimismo activaron la Alerta ROJA para Guerrero por huracán Otis. La alerta roja representa que hay un máximo peligro del fenómeno meteorológico en cuestión y se recomienda a la ciudadanía alejarse de ventanas para evitar lesionados, permanecer en sus hogares o refugios temporales, conservar la calma y esperar indicaciones de Protección Civil.
Además las playas permanecerán cerradas a bañistas y los puertos a la navegación.
El SMN mantiene en alerta un tramo de casi 500 kilómetros entre Punta Maldonado y Zihuatanejo, en Guerrero, así como parte de la costa del vecino estado de Oaxaca, en el sur del país.