Eso fue lo que sucedió con el pequeño, Marcos Aoás Corrêao popularmente conocido como Marquinhos, sobre sus hombros recae que Brasil no haya llegado a semifinales del mundial de Qatar, así es.
Croacia y Brasil se debatían su pase a semifinales, en el tiempo reglamentario quedaron en ceros, por lo que el partido se alargó 30 minutos más a tiempo extra. Neymar hizo tocar el cielo a su equipo cuando anotó el gol que los colocaba en la siguiente fase, pero eso fue temporal.
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Vino la aparición histórica e inolvidable de Marquinhos, al tratar de resistir un contraataque de los croatas, el defensa del PSG trató de bloquear un disparo a gol del delantero croata, pero solo lo desvió y el gol revivió a los croatas y hundió los ánimos de los brasileños. Marquinhos, solo se arrodilló y hundió su cabeza en el césped y entre sus manos, sabía lo que había provocado.
El tiempo extra terminó y llegaron los penales, la preocupación de los brasileños en sus rostros era evidente. Los brasileños fallaron algunos, los croatas ninguno, pero venia el turno de Marquinhos, podría reparar su error y meter a Brasil en la lucha, trató de recuperar su confianza, pero su disparo se estrelló en el poste y de nuevo se arrodillo al césped y los croatas festejaban su pase a semifinales como lo lograron en Rusia 2018, adiós Brasil.
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