En una bodega de dos pisos se realizó una fiesta clandestina denominada “Perreo Clandestino”, pero más de mil jóvenes, en su mayoría menores de edad, tuvieron que ser desalojados, además se alertó sobre alcohol adulterado.
En un video difundido en Twitter por @amarilloalarcon, se observa que cuando los asistentes se percatan del operativo tratan de evacuar desesperadamente, al grado de empujarse. “¡Vayan saliendo, vayan saliendo!”, se escucha gritar a alguien.
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Por ello, elementos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC), de la policía de la alcaldía Iztapalapa y del Instituto de Verificación Administrativa de la CDMX (INVEA) arribaron la tarde de este 3 de marzo al predio para realizar un operativo.
Además, se informó que al menos fueron atendidos cinco jóvenes, entre ellos tres mujeres, que presentaban intoxicación por el consumo de alcohol, por lo que tuvieron que ser cargados para ser auxiliados por las autoridades.
Vecinos señalaron a Canal 6 que, eran tantos los asistentes, que algunos no pudieron ingresar, por lo que empezaron a tomar y fumar marihuana en la acera, pero algunos perdieron el control.
Este incidente hizo recordar la tragedia del News Divine. El 20 de junio de 2008, cerca de las 18:00 horas, elementos del Mando Único del Sistema de Coordinación Policial y elementos de la Secretaría de Seguridad Pública del entonces Distrito Federal (hoy Ciudad de México) llegaron a la discoteca ubicada en la Avenida Eduardo Molina, en la alcaldía Gustavo A. Madero.
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Incluso, se solicitó el apoyo de una ambulancia debido a que una de las víctimas, de entre 16 y 17 años, se encontró grave y con riesgo de sufrir una broncoaspiración, pero hasta ese momento no se había podido contactar con sus familiares.
La entrada de los uniformados a la discoteca causó pánico entre los 102 jóvenes, lo que desató el caos en el lugar, provocando una estampida para intentar salir del lugar que era sumamente reducido y sin ventilación.
De acuerdo con los vecinos de la colonia Los Ángeles, cada viernes un sinnúmero de estudiantes llegaban al inmueble ubicado en la calle Amapola, a través de una convocatoria vía redes sociales titulada “Perreo Clandestino”. Sin embargo, se denunció que en el lugar había venta de alcohol adulterado.
*MG